El FBAC Benaguasil recupera su orgullo con una lección de casta y empuje ante el Torrent CF (2-2)

El FBAC Benaguasil logró empatar, a falta de cinco minutos para que se cumplieran los 90 que establece el reglamento, un partido loco… que comenzó ganando, que pudo sentenciar en apenas 10 minutos y que tuvo que remontar. Su rival, el Torrent CF, acabó sufriendo el acoso de un conjunto benaguasilero que volvió a ser ‘bronco y copero’…

JGC

Al Valencia CF que solía naufragar en liga, pero que ofrecía su mejor versión en la competición copera (normalmente, con un juego embarullado y agresivo, más que con un fútbol vistoso y de toque) se lo conocía como un equipo “bronco y copero”. Al FBAC Benaguasil, que siempre ha sido un equipo con futbolistas “de sang calenta”, se le echaba de menos un mayor empuje y vehemencia a la hora de hacerse fuerte en su estadio. Sin embargo, tras la visita del segundo clasificado de la liga (el Torrent CF), los aficionados locales deben admitir que el AC Benaguasil “bronco y copero” de antaño ha regresado.

El equipo entrenado por Sergio Moret tiene evidentes carencias en su plantilla: falta gol y clarividencia a la hora de dar el último pase… y, probablemente, faltan centímetros (y kilos) en el centro del campo. Todo ello se admite sin reservas y se acepta, como también se da por hechos algunos fallos puntuales en defensa que acaban costando goles en contra. Incluso se concede que la propuesta futbolística está negativamente influenciada por las necesidades del club, por lo que se ve como lógico renunciar al juego en pos del resultado. Pero no se puede disculpar la falta de garra que se ha visto en algunos encuentros… y, del mismo modo, ahora se puede celebrar que el espíritu que definió a un equipo vuelve a sentirse cuando los jugadores benaguasileros se lanzan sobre la portería rival.

En los primeros minutos del choque, la salida en tromba del FBAC Benaguasil fue fulgurante y, lejos de sentirse amedrantado por la entidad de su rival (el segundo clasificado de la liga), el equipo local improvisó una defensa con Tico y Pulec (ambos estuvieron sensacionales, especialmente el primero), ante las bajas de Marcos y Josep, y situó a Elías en el lateral zurdo; con un centro del campo aguerrido (en el que debutaba el joven Kevin) y con Cristian en punta, el conjunto benaguasilero se puso manos a la obra para intentar sorprender al Torrent CF.

Se encargó de lograrlo Jorge Monzó (cuya presencia en el equipo, y su buen juego, es una magnífica noticia para el club): un centro desde la banda fue cabeceado por el mediapunta al fondo de la red de la portería rival. Uno ya ni se acuerda del último gol del equipo ‘en jugada’… y ese hueco en la memoria debe ser compartido, porque toda la grada lo festejó como si de un título se tratara.

Aún pudo aumentar la renta local el propio Monzó, en una jugada enbarullada… pero su remate final fue detenido sobre la línea de gol, ante la desesperación de la afición local (que sabe perfectamente cuán alta está la cotización del gol en ese equipo)… y es que intuía el sufrimiento que estaba por llegar.

Lo cierto es que no parecía que hubiera nada que temer, en el bando local, ya que el Torrent CF no era capaz de dar tres pases seguidos… ante la incredulidad de los aficionados benaguasileros y la de los torrentinos: ni unos ni otros acertaban a comprender cómo era posible que ese equipo esté en situación de pelear por subir a Regional Preferente.

Sucede que el FBAC Benaguasil fue perdiendo presencia en el centro del campo (pese al gran partido de Javi, quien se multiplicó en la zona ancha); no le llegaban balones al catalizador del juego ofensivo del FBAC Benaguasil, Orellano, y los intentos de Cristian por bajar los balones aéreos que le enviaban sus compañeros resultaban estériles; además, Kevin y Monzó dejaron de progresar por las bandas.

El cortocircuito local fue total y al Torrent CF no le quedó más remedio que asumir el control del partido; y, claro, tiene jugadores para hacerle daño a sus rivales… lo que explica su buena clasificación. Además, supo desquiciar el equipo local a Óscar, quien tuvo que ser sustituido tras haber sido amonestado y tener las pulsaciones tan aceleradas que su técnico vio claro que iba a acabar siendo expulsado. Debería este gran lateral derecho tomar ejemplo de su compañero Elías, quien se las tuvo tiesas con un jugador visitante y en ningún momento perdió la serenidad. Claro que estas cosas se aprenden con la experiencia…

Lo cierto es que, tras un par de avisos que llegaban desde el flanco izquierdo del ataque torrentino (y que fueron bien contestados por el guardameta local, José Antonio), llegó un libre indirecto colgado hacia el segundo palo que permitió a uno de los centrales que se había incorporado al ataque rematar absolutamente solo y llevar el 1-1 al marcador. La grada reclamó tímidamente un supuesto fuera de juego… la jugada no está clara, pero tampoco cabe generar polémicas, ya que no se trata (en ningún caso) de un flagrante error arbitral. Así que guárdense las quejas para más pertinente ocasión.

Faltaban 10 minutos aproximadamente para el final del primer tiempo y se produjo un bajón en el ritmo del juego: seguía dominando el Torrent CF, el FBAC Benaguasil estaba anestesiado… pero no sucedió nada relevante hasta el final del primer acto.

En el inicio de la segunda mitad se acentuó el dominio visitante, mientras el FBAC Beaguasil seguía defendiéndose lo mejor que podía: le faltaba la lucidez ofensiva de los primeros 25 minutos del encuentro y el equipo, en su conjunto, parecía caminar entre tinieblas. Sin embargo, no se sufría en exceso y todo apuntaba a un segundo tiempo poco entretenido, que acabaría en un 1-1.

Nada más lejos de la realidad: la incursión de un vigoroso mediocentro en las filas visitantes revolucionó (dos veces) el encuentro: la primera fue a través de un saque directo de una falta, a unos 35 metros de la portería defendida por José Antonio, que acabó convirtiéndose en el 1-2… aprovechando que el meta local no fue capaz ni de blocar el esférico ni de despejarlo de puños. El FBAC Benaguasil entró en la UVI durante unos minutos, estuvo clínicamente muerto y parecía incapaz de volver a entrar en el partido…

Una vez más, ¡sorpresa! El autor del 1-2 se convirtió en el mejor aliado del FBAC Benaguasil.. y en el auténtico recuperador de las esencias del club. Como dicho futbolista no rehuía del choque ni siquiera de casualidad y tras demostrar que era un especialista en estar presente en cualquier jugada en la que hubiera recriminaciones y empujones entre los jugadores de uno y otro equipo, acabó por desatar las iras de la grada y encender los ánimos de los futbolistas benaguasileros.

De este modo, el equipo de Sergio Moret se fue al ataque; su consigna parecía ser: “podréis ganar, pero vais a tener que sufrir”. La primera acción de peligro la protagonizaron, en una serie de acombinaciones, Javi, Mario, Lucas… y Orellano, que acabó mandando el balón por encima del larguero; poco después, Lucas tuvo en sus botas otra acción clara pero le faltó ambición (la grada local clamaba “Tirá a puerta, pibe, rematá”).

Otra acción de ataque benaguasilera no pudo ser rematada ni por Conino (que esta vez sí que peleó por cada balón, como debe ser) ni por Kevin; Javi tuvo un remate excesivamente cruzado y Kevin hizo que la afición se levantara de sus asientos porque un remate suyo con la pierna izquierda, con una rosca envenenada que se colaba por la escuadra del palo largo fue contestada con una asombrosa parada del guardameta rival. Repartamos méritos: magnífico remate y estratosférica parada. Bravo por ambos.

La traca final (y de traca saben mucho en Benaguasil) estaba cerca de llegar: un saque de falta, ejecutado desde la frontal del área visitante, sorteó la barrera torrentina y botó a un metro del portero, quien logró repeler el esférico con una buena estirada… sin embargo, el balón fue a parar a los pies ¡de Pulec!, quien demostró que es un defensa con alma de delantero, y logró marcar el 2-2 ante el grito de todos los seguidores benaguasileros. Se vivió un auténtico momento de justicia futbolística, ya que el equipo del Camp de Túria no se merecía perder.

El gol fue como una bomba para el Torrent CF: su objetivo es subir de categoría y no contaba con empatar ante el FBAC Benaguasil, por lo que su primera reacción fue la de irse al ataque; pero el equipo local no se amedrentó y, como un boxeador sonado dispuesto a intercambiar golpes hasta el final, aceptó el reto de luchar hasta el pitido final. Hubo un par de aproximaciones a cada área y el conjunto visitante comprendió que es mejor empatar en ‘El Barranquet’ que no regresar a casa de vacío. Y, al final, el resultado final fue de empate. Un empate épico, copero… de los de antes: de los de siempre.

FBAC Benaguasil: José Antonio; Óscar (Nacho), Tico, Pulec, Elías; Jorge Monzó (Conino), Javi, Monfort (Mario), Kevin; Cristian (Lucas).

Torrent CF:

Goles: 1-0: Jorge Monzó (5’); 1-1: (35’); 1-2: (55’); 2-2: Pulec (85’).

Sergio Moret, entrenador del FBAC Benaguasil: “Creo que se ha visto a un FBAC Benaguasil ambicioso, que se ha recuperado de un resultado adverso y que lo ha dado todo. Lo malo es que hemos podido marcar el 2-0, y eso nos habría dado mucha tranquilidad; pero hemos fallado y nuestro rival nos lo hubiera podido hacer pagar muy caro. Afortunadamente, el equipo no se ha rendido y ha podido arañar un punto”.

 

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