Podemos denuncia la muerte por picudo de la mitad de las palmeras de Peñasol

peñasol

El Ayuntamiento de Riba-roja culpa a la empresa que explotaba el recinto e inicia el tratamiento

El grupo municipal de Riba-roja Puede ha denunciado el abandono del palmeral ubicado en el clausurado complejo Peñasol y que ha acabado con la desaparición de más de la mitad de los ejemplares afectados por picudo.

Desde la oposición han recordado a través de un comunicado que en el pleno del pasado mes de marzo solicitaron que se actuara cuanto antes en la zona verde de propiedad municipal situada en el polígono de l’Oliveral ya que “había algún ejemplar con picudo y entendíamos que con el verano este insecto podría extenderse a los ejemplares  contaminando el resto”. Entonces, según Podemos, “el alcalde nos contestó que se pondría en contacto con los técnicos por si era necesario hacer un tratamiento de choque. Los meses han pasado y por la inacción del ayuntamiento se ha perdido el palmeral”.

El grupo municipal ha contabilizado 22 ejemplares perdidos, “quedando sanos prácticamente sólo las palmeras más jóvenes y mientras el picudo campa a sus anchas por la zona”, aseguran.

Desde el equipo de Gobierno han respondido que el Ayuntamiento de Riba-roja de Túria ya ha iniciado el protocolo de actuación para tratar contra el picudo rojo las 46 palmeras  que se puedan haber visto afectadas por la plaga.

Según el informe elaborado por el técnico municipal de Jardinería y Paisajismo ninguno de los ejemplares dañados está considerado “singular o ejemplar”, según la Ley de Patrimonio Arbóreo Monumental y las palmeras más afectadas están descabezadas y sus palmas totalmente secas, “lo que nos lleva a considerar que estén afectadas desde hace mucho tiempo”.

Los ejemplares se encuentran en la zona verde de 12.538 metros cuadrados que fue recuperada para uso público hace ocho meses, una vez fue resuelta la fase concursal de la mercantil Peñasol S.L. Según se desprende del informe, la empresa sería “la única responsable de las palmeras afectadas por el picudo, al no realizar el correspondiente tratamiento”.

El Ayuntamiento de Riba-roja de Túria mantuvo una relación contractual con la empresa Peñasol que establecía el pago de 1.200 euros revisables anualmente con el IPC para que la mercantil pudiese construir en la parcela zonas ajardinadas, deportivas y un anexo para ampliar el uso de restauración.

El complejo cerró sus puertas al público en abril de 2016 y se declaró en suspensión de pagos. No obstante el juez impidió la entrada del Ayuntamiento a las instalaciones hasta que no fuera resuelta la fase concursal, hace ocho meses.

El alcalde de Riba-roja de Túria, Robert Raga ha denunciado la forma de proceder de los antiguos responsables políticos con este contrato y ha acusado al portavoz de Riba-roja Pot, Rubén Ferrer de “crear alarma social, a través de la demagogia con el único interés de desprestigiar la gestión de este gobierno en temas como la protección del medio ambiente y concretamente en el arbolado, en el que estamos realizando un destacado y reconocido trabajo”.

Según el informe del técnico de Jardinería municipal, de las 54 palmeras, ocho se encuentran en una zona privada y 46 en la zona pública, de las cuales “un tercio están muertas como  consecuencia de la afectación del picudo”.

 

 

 

 

Comentaris tancats

Respondre

La vostra adreça de correu electrònic no es publicarà