La Conselleria Cultura ha sacado a licitación las obras de rehabilitación de la fachada retablo de la Iglesia de la Asunción de Llíria por un importe de 181.285 euros. Los trabajos tienen un plazo de ejecución de seis meses. En la misma intervención el IVACOR restaurará el conjunto escultórico compuesto por ocho figuras.
P.G.
El departamento de María José Catalá ha sacado a licitación las obras de restauración y rehabilitación, en distintos edificios históricos de la Comunitat Valenciana, por valor de 1,2 millones de euros, entre los que figura la Iglesia de la Asunción de Llíria.
El DOCV publicó ayer la licitación de las obras de rehabilitación de la fachada retablo de la Iglesia de la Asunción de Llíria por un importe total de 181.285 euros y un plazo de ejecución de seis meses. En la misma intervención los técnicos de IVACOR restaurarán el conjunto escultórico que preside el retablo compuesto por ocho figuras.
La fachada retrablo del templo edetano es una importante muestra de la arquitectura renacentista entre las más representativas de Valencia como la de Carmen, San Miguel de lo Reyes o Chelva.
El alcalde de Llíria, Manuel Izquierdo, ha expresado su satisfacciónpor el inicio del procedimiento administrativo para la restauración del templo. “En Llíria contamos con un importantísimo patrimonio histórico y es nuestra obligación preservarlo con esmero tanto para nuestros vecinos como para el visitante. Por ello es una buenísima noticia la licitación de las obras de rehabilitación de la fachada retablo de la iglesia de la Asunción por parte de la conselleria”.
Izquierdo ha recordado también que el Ayuntamiento de Llíria “llevaba varios meses trabajando con la consellera María José Catalá en la consecución de estas obras, ya que la restauración de la fachada del templo pone en valor una de las mayores joyas artísticas del municipio”.
La iglesia parroquial se construyó entre los años 1627 y 1676 con los planos del jesuita Pablo Albiniano de Rajas, aunque su fachada con esculturas no fue terminada hasta el año 1704.
Se trata de un templo barroco que sigue el espíritu de la Contrarreforma. Los maestros de obra fueron Martín de Orinda y Tomás Leonard Esteve. Posteriormente se incorporó Pedro de Ambuesa, quien probablemente ejecutó la fachada y las imágenes son obra del escultor Raimundo Capuz realizadas entre 1700 y 1704.