Enrique Santafosta, alcalde de San Antonio de Benagéber
Hace justo un año, en las elecciones municipales del 26-M, fueron elegidos o reelegidos como alcaldes de sus pueblos. Hoy afrontan un primer tramo de esta nueva legislatura marcado por la pandemia del coronavirus. Desde el confinamiento lanzamos las mismas preguntas a cada uno de los responsables políticos de los municipios de Camp de Túria para hacer una radiografía de la comarca en plena crisis sanitaria y económica y conocer cómo se preparan para la desescalada anunciada por el Gobierno a partir de este arranque del mes de mayo.
¿Qué medidas se han adoptado para hacer frente a las crisis del coronavirus?
Antes del confinamiento ya comenzamos a tomar medidas como el teletrabajo y trabajamos con una empresa que se ocupa de la desinfección diaria de todas las dependencias y del centro de salud. Adquirimos 3.200 mascarillas, de ellas 2.000 quirúrgicas y 1.200 FPP2.
Además, fruto de donaciones de vecinos y empresas reunimos más de 8.000 pares de guantes de nitrilo y 2.000 mascaras de policarbonato, todo ello se ha repartido entre los comercios del y los vecinos que no han cesado en sus actividades, así como aquellos que realizaban las salidas admitidas por el decreto.
Del mismo modo se adquirieron 1.000 mascarillas infantiles para entregarlas en diferentes puntos a los niños que salían el día 27 del confinamiento, entregándoles un diploma por su comportamiento ejemplar, una mascarilla y un par de guantes.
Se han implantado nuevas y mayores ayudas para las personas más desfavorecidas, mediante bonos de supermercado, ayudas económicas directas, se ha aumentado esta partida en más de 70.000 euros y se seguirá haciendo cuanto sea necesario; se ha colaborado con Cruz Roja en el reparto de alimentos básicos.
Se creó desde el primer día un servicio de voluntariado que lleva las cosas esenciales a las personas mayores y de riesgo. Quiero agradecer la tarea de estos voluntarios que han permanecido disponibles cualquier día a cualquier hora para ayudar en lo que fuese necesario. Y se ha modificado el calendario fiscal, alargando los periodos voluntarios de pago y facilitando los fraccionamientos de todos los impuestos.
Estamos dando forma a una serie de medidas económicas para que nuestro municipio se recupere lo más la rápido posible
¿Qué impacto ha tenido en el municipio?
En este momento no se puede calibrar exactamente, pero que duda cabe que va a ser demoledor en lo económico, aunque ya estamos dando forma a una serie de medidas que complementadas con las autonómicas y estatales hagan que nuestro municipio se recupere lo más la rápido posible. En la legislatura anterior se dejó unas arcas saneadas que ahora nos permitirán afrontar con fuerza esta crisis económica que se nos avecina.
A día de hoy por desgracia los ayuntamientos seguimos sin tener datos de la afección de esta pandemia entre nuestros vecinos. Sabemos de casos y eso nos entristece, pero no nos quita las fuerzas para seguir luchando y que nadie se quede atrás.
En lo social es evidente que esta sociedad ha cambiado y por bastante tiempo, los comportamientos entre las personas han cambiado y seguirán cambiando; si por algo se destacan los municipios y más el nuestro, es por la cercanía de las personas, algo que ahora cambia de forma radical.
Solo he visto fortaleza y determinación en mi pueblo a la hora de afrontar esta crisis
¿Qué fortalezas y debilidades como pueblo ha hecho aflorar esta crisis?
He visto un pueblo respetuoso con las medidas y con el confinamiento, un pueblo solidario. Solo he visto fortaleza y determinación en mi pueblo a la hora de afrontar esta crisis.
¿Cómo va a ser la desescalada?
La desescalada no depende de los municipios, sí su control, pero no la forma; esperemos que sea responsable por parte del gobierno central y autonómico y que los ciudadanos sigan como hasta ahora conscientes de la gravedad de la situación, ya que un paso atrás nos llevaría a una situación más complicada.